martes, 23 de septiembre de 2008

Pupilas

Calor...
Ojos recorriendo tu piel,
fulgor proyectado por tus pupilas.

Sudor...
Defensa de tus sentidos
ante el ataque de mi mirada.

Frío...
El aire ocupa ahora tu lugar,
una ausencia que quema.

Tu mirada, tu piel,
tus pupilas en mi piel,
tu fuego, tu sudor
y tu ausencia.

Dedicado a Nuria




lunes, 8 de septiembre de 2008

El Golpe

La historia que ahora os comunico no es inventada... Aunque tampoco es verdad. Bueno, aún no tengo noticia de que haya pasado... Quizás haya pasado en algún momento y no nos hayamos enterado, o quizás esté todavía por pasar... ¿Quién sabe lo que pasó o lo que pasará...? ¿Quién me dice que no se pusieron de acuerdo Isabel y Fernando para hacernos creer que ellos expulsaron a los musulmanes? ¿O porqué nos creemos que cuando Cristóbal llegó a las Américas no estaba allí ya un contingente de pálidos chinos reclamando aquel trozo de polvo para su emperador? Quien os afirme y os demuestre con documentos y consecuencias económicas estos hechos, decidles: ¿usted estuvo allí?

Parece una tontería lo que lees, ¿verdad? ¿Y quién te ha dicho que no lo sea? (Le tuteo, si me permite). En cambio, yo si he estado durante los hechos que más adelante os narraré... ¿Dije antes qué eran falsos? Pues quizás hayan sido ciertos... ¿Dije antes que no había tenido noticia de ellos...? Dime quién sabe al cien por cien la verdad de lo que pasa... Cada papel dice lo que el director, gordinflón y amante de la buena vida, decide por el teléfono móvil a bordo de su yate. Pues, como a mi no me paga ninguno de estos empresarios enchaquetados, os cuento los hechos sin ningún velo subjetivo que haya podido alterar ni la más mínima mota de polvo sobre alguna mesa.

Y es ahí, en una mesa, donde empieza la historia... Serían las cuatro de la tarde cuando nuestro protagonista (no diré su nombre, para velar por su seguridad) tomaba un café con leche, acompañado por uno de sus amigos íntimos, el doctor Fernández (este nombre es inventado; aunque él ya esté muerto, su familia sigue viva). Entre el humo de los cigarrillos charlaban entretenidamente. Afuera de los cristales del bar, la ciudad se movía rápida e indiferente; impasible ante sus habitantes. Un mar de asfalto y gigantes marejadas de edificios que ahogaban a los caminantes...

- ¿Y sobre "el plan", qué sabes?- preguntó el doctor Fernández.
- Todo está listo... Mañana todo cambiará- contestó el Planeador (llamaremos así, por ahora, al protagonista).
- No sé cómo puedes estar aquí, fumando tranquilamente y con una taza de café, sabiendo que mañana quizás subas a la gloria o quizás estés bajo tierra...
- Nervios de acero, amigo- contestó el Planificador- Mira por la ventana, ¿ves como anda la gente? Cada uno inmerso en sus problemas, sin hablar con los demás, ni levantar la mirada del suelo...
- Sí... ¿qué pasa?- preguntó sorprendido el doctor- No me dirás que estás igual de tranquilo que ellos, ignorando lo que les rodea... "El plan" es muy importante...
- No, no te digo eso... Te digo que mi único problema ahora es no echar las cenizas dentro de la taza...

domingo, 7 de septiembre de 2008

Rojo Crisis

Con la crisis económica la venta de pintalabios de color rojo sube considerablemente...

A mal tiempo, buena cara...

O el ser humano es estúpido o es indescriptible, que viene a ser lo mismo.